Operación huésped: una palomita, cómo no

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Lo primero que se informó cuando se supo que el hijo de Gadaffi intentaba instalarse ilegalmente en México, fue que sus operadores clandestinos pretendían adquirir para él una propiedad en Bahía de Banderas, Nayarit. Al día siguiente se declaró en radio,TV y por algunos personajes del mundo del bien raíz establecidos en el area, que el proyecto escogido para la permanencia del heredero libio y familia había sido Punta de Mita en el mismo municipio antes mencionado. Ahora me dicen que el periódico Reforma, asegura que según informes de la PGR la casa se encuentra en La Cruz de Huanacaxtle, una marina a 15 kms. antes de llegar a Punta de Mita. Pero da igual, porque las tre areas mencionadas son parte de la afuente región costera de Riviera Nayarit con presencia de un cuantioso capital de inversión local y extranjero para el máximo recreo, para el goce del lujo enclavado en la naturaleza. Por varios de los desarrollos de la zona han pasado mandatarios, jeques, celebridades, hasta Bill Gates, Slim y demás oligarcas y políyicos nacionales. Por lo que la coartada internación de Saadi Gadaffi a nuestro territorio, no sería noticia de gran impacto, salvo para incrementar la sospecha de que otros terrosistas islámicos podrían considerar a México como atractivo centro de operaciones como ya ha advertido el gobierno estadounidense, o porque temen que ya estén internados en algúnos otros puntos cuya privacía y atención al detalle de permanecer encubiertos, no permite su localización. Pero para esconderse en México o Estados Unidos "con plena libertad", nomás el Chapo. Lo de Gadaffi fue un atrevimiento, un acto de inocencia o de estupidez propia de la prepotencia, del mal asesoramiento, de la altanería que hubiera significado que un brazo de Gadaffi se les hubiera metido justo en el paraíso escogido por los más exigentes para el descanso y la relajación. Todo quedó en "si se hubiera dado...lo que no fue...Una palomita, no obstante, para "la creciente cooperción bilateral", cómo no.