Subscribete:

Leaderboard

martes, 14 de febrero de 2012

El rescate al campo será prioridad del nuevo gobierno: AMLO




El precandidato presidencial de la coalición Movimiento Progresista, Andrés Manuel López Obrador, afirmó que el nuevo gobierno democrático tendrá como una prioridad fundamental el rescate al campo por razones de justicia, económicas, de seguridad pública y de soberanía nacional.

Acompañado por la próxima secretaria de Reforma Agraria, María Luisa Albores González, organismos campesinos, empresarios, expertos en el tema, López Obrador comentó que el rescate al campo se hará a partir de la conciliación, la armonización de intereses, con la participación de todas y de todos y bajo el criterio del interés nacional, sin dogmas ni cargas ideológicas, sino con racionalidad y juicio práctico.

Tras invitar a los mexicanos y la mexicanas a salvar al campo, para salvar a México, el precandidato presidencial expuso que fracasó la política aplicada en los últimos años para el sector agropecuario y pesquero ha resultado un rotundo fracaso, porque en el marco del neoliberalismo, desde 1983, se inició el abandono de la actividad productiva en el campo.

Además, señaló “de manera simplista e irresponsable se decidió que en un mundo globalizado se podrían comprar alimentos y materias primas baratas en el extranjero y que no era necesario que el Estado promoviera el desarrollo del sector agropecuario y pesquero.

“A partir de esta concepción neoliberal, los tecnócratas redujeron subsidios, eliminaron aranceles, permisos previos de importación y dejaron de considerar necesaria la inversión pública destinada al sector agropecuario. En otras palabras, dejaron sin protección a los productores y desmantelaron toda la política de fomento productivo”, recordó al encabezar el foro Rescate al Campo y la Soberanía Nacional.

Los efectos de la apertura comercial se agravaron con la drástica disminución de la inversión pública destinada al sector agropecuario, se redujo hasta casi desaparecer el crédito comercial y el de la banca de desarrollo. Por si esto fuera poco, el sistema de precios de garantía para los productos básicos fue eliminado con el pretexto de que era una política agrícola anticuada, aunque en Estados Unidos se mantiene bajo la forma de "ingreso objetivo" para garantizar los precios de maíz, trigo, soya, arroz, sorgo y otros, enumeró.

Mencionó que los resultados de esta otra guerra han sido desastrosos: se redujo la superficie de cultivo agrícola; se abandonaron potreros; disminuyó el hato ganadero; se perdieron empleos rurales; creció la emigración como nunca; se despobló la mitad los municipios del país y aumentó la pobreza, la inseguridad y la violencia en todo el territorio nacional.

“Habría que agregar que ahora es mayor la dependencia alimentaria. Por ejemplo, en los últimos quince años, se incrementaron 400 por ciento las importaciones, para lo cual se erogaron alrededor de 180 mil millones de dólares”, comentó

Andrés Manuel López Obrador puntualizó que en 1980, antes de la conversión neoliberal, el país importaba 27 por ciento del consumo nacional de arroz, en 2010 adquirimos en el exterior 75 por ciento; en cuanto al maíz, las importaciones pasaron del 17 al 25 por ciento; traíamos de fuera 10 por ciento de trigo y ahora 42 por ciento. De 1990 a 2010, la importación de carne de bovino en canal se incrementó 281 por ciento, la de huevo, 185 por ciento, la de ave, mil 35 por ciento.

Señaló que es cierto que la agricultura de exportación ha crecido, pero no ha sido suficiente para compensar el incremento creciente de las importaciones en alimentos y materias primas. Baste decir que el déficit en la balanza comercial agroalimentaria pasó de 694 millones de dólares anuales, en el periodo 1980-1982, a 6 mil millones de dólares por año en el trienio 2007-2009.

Recordó que hay que recordar que por cada dólar en alimentos que México importa, no sólo transfiere al exterior divisas escasas que podrían utilizarse para otros fines, sino que perdemos capacidad productiva y empleos rurales, se reducen los ingresos campesinos y aumenta la pobreza. “Más aún, dejamos de aprovechar efectos multiplicadores de la actividad agropecuaria sobre la producción, el empleo y la inversión en otras ramas de la economía”, sostuvo.

El precandidato presidencial expresó que es indispensable y urgente cambiar la actual política agropecuaria, “orientando todos nuestros esfuerzos y recursos a la obtención de la soberanía alimentaria, es decir, que podamos producir en México lo que consumimos”.

No hay comentarios:

Publicar un comentario