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miércoles, 1 de febrero de 2012

La Iglesia católica busca recuperar privilegios perdidos desde el siglo 19, dicen organizaciones



Leo publicado hoy en La Jornada Jalisco un texto de Juan Carlos G. Partida, 31 enero 2012, que me parece de suma importancia para el respeto al Estado laico en nuestro país, en ocasión de la reforma constitucional al Artículo 24 que se dió en la Cámara Baja el pasado mes de diciembre.

La jerarquía católica de México está detrás de la reforma al artículo 24 y pugna por la recuperación de privilegios perdidos desde el siglo 19, instruida por el papa Benedicto XVI y su proyecto para la región iberoamericana, alertaron organizaciones nacionales y locales que conforman varios frentes en defensa del Estado laico y que anticiparon marcación personal a los senadores en la discusión y decisión del tema.

En rueda de prensa, coincidieron que en los hechos la reforma aprobada por la Cámara de Diputados el 15 de diciembre y en espera para llegar al pleno para su discusión en la de Senadores, oficializa la fe católica como propia del Estado mexicano.

Neftalí Álvarez, de la organización República Laica con sede en la capital del país, afirmó que se trata de una reconstitución de las relaciones del gobierno mexicano con la jerarquía católica desde que en 1988, a su llegada como presidente, Carlos Salinas de Gortari concedió en su afán de legitimarse lo que el Vaticano buscaba desde hace tiempo, su reconocimiento oficial en México a través del sostenimiento de relaciones diplomáticas, lo que abrió paso al estado confesional que hoy se vive y que los siguientes tres presidentes han agudizado.

“Benedicto XVI después de su toma de posesión juntó a los 20 nuncios apostólicos de Latinoamérica y les ordenó que incidieran en las constituciones de los estados para que tuvieran una verdadera libertad religiosa, frase que viene manejando desde 1927 la asociación nacional cristera, esta libertad religiosa que está pidiendo el Episcopado mexicano en realidad son beneficios para ellos mismos solamente”, afirmó.

Jesús López Lobato, apoderado legal de la asociación civil Foro Intereclesiástico Mexicano recordó el “desaseo” con que fue aprobada por los diputados la iniciativa, quienes de un plumazo permiten que se borren dos de las libertades fundamentales de los mexicanos, conquistadas por el constituyente de 1917 como lo son la libertad de creencia y la de culto.

Jaime Hernández Ortiz, de la Coordinadora 28 de Mayo, dijo que en el fondo también se busca establecer un concordato en México, para que con ello el catolicismo se convierta en la religión oficial del país, lo que además abriría la puerta a la impartición de religión en las escuelas públicas y hasta la participación de la curia en la selección de maestros a través de criterios de supuesta moralidad.

La diputada local por el PRI, Noa Zurisadai Acosta Esquivias, manifestó su rechazo a la iniciativa y recordó que hace unos días el Congreso de Jalisco aprobó girar un exhorto al Senado para que se investigue el “verdadero trasfondo” de la reforma pues, insistió, fue a solicitud y modo de lo que pidió el Episcopado.

“Y lo digo públicamente porque así fue, hay documentos, ellos lo solicitaron. No se trata de una ampliación de libertades sino de privilegios”, dijo la diputada.

López Lobato anticipó que desde este jueves que reinicien las sesiones en el Senado y hasta el cierre del periodo a mediados de abril, se hará presión con los legisladores para que no ocurra lo sucedido en la Cámara de Diputados y se haga un análisis de fondo, con la realización de foros que convoquen a la sociedad en general, que permita llegar a conclusiones en las que se salvaguarden las históricas conquistas que en la materia se lograron en México hace más de 100 años.

Anticiparon que como parte de la presión también se publicarán desplegados a nivel nacional y en diversos diarios regionales, con el fin de hacer extensiva a la ciudadanía en general la intención por instaurar en México un estado confesional ahora legalmente, luego que por años ha sido eso de facto.

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