La Procuraduría General de Justicia del DF quiere dar jaque mate al asunto de las seis camionetas con logo de Televisa decomisadas en Nicaragua, al determinar que no fueron dadas de alta por esa empresa, señala la publicación mexicana Reporte Indigo.
En México hay un montón de interrogantes que al parecer ninguna autoridad está interesada en responder y hasta el momento existe mayor preocupación por demostrar la inocencia de Televisa que conocer de las andanzas de los 18 detenidos que se pasearon a sus anchas por las carreteras centroamericanas durante varios años como empleados de la televisora mexicana.
En Nicaragua, este miércoles quizás empiecen a conocerse algunas respuestas que flotan en el ambiente: ¿Cómo es que las autoridades aztecas y centroamericanas no se dieron cuenta de que una mujer treintañera, originaria al parecer del D.F mexicano estaba burlando burdamente a todos los organismos de Inteligencia?
Si Raquel Alatorre viajaba siempre hasta Costa Rica, ¿qué es lo que llevaba hasta allá y qué traía de regreso con sus muchachos y sus Vans?, ¿Dejaban algo en los otros países del Istmo? ¿Por qué no hay policías sancionados en ninguno de los países donde los mexicanos hicieron lo que les vino en gana durante varios años?
¿Seguirán manteniendo los detenidos que son de Televisa?, ¿darán a conocer las autoridades de Nicaragua los nombres de las personas a las que llamaron los presuntos narcos al ser declarados prisioneros de la justicia nicaragüense?
¿Hay “peces gordos” detrás de esta operación que incluyó una millonaria inversión en modernos equipos de televisión para realizar transmisiones televisivas vía satélite? ¿Alguien comprobó en Televisa que Alatorre y su gente transmitieron o no alguna vez?
¿Quiénes eran sus contactos en cada país y en este caso en Nicaragua? ¿A qué cártel del narcotráfico pertenecen los detenidos del “caso Televisa”? ¿Aparte de dinero y drogas, realizaron ejecuciones en Centroamérica?
Reporte Indigo se refiere por su parte al deslinde de las Vans que hizo a Televisa la Procuraduría General de Justicia del Distrito Federal (PGJDF) el propio Día de los Muertos en México.
“El resultado de la investigación deja muchas preguntas en el aire y deja en claro que la PGJDF trabajó el caso con muchas limitantes, dado que gran parte de las evidencias y documentos están en propiedad de las autoridades nicaragüenses”, señalan.
También recuerdan que en el caso de la Secretaría de Transporte y Vialidad del Distrito Federal (Setravi), que se mantuvo en el ojo del huracán y que incluso se llegó a hablar de que podría estar infiltrada por la organización criminal “Los Zetas”, por ejemplo, hasta ahora no se sabe si habrá sanciones penales para funcionarios involucrados en la supuesta falsificación de documentos.
Tampoco se sabe si la supuesta corrupción en Setravi llega a nivel de ventanilla o alcanza a funcionarios de mayor rango.
Y respecto a la probable relación o participación de Amador Narcia Estrada, vicepresidente de noticias de Televisa, en el caso de las camionetas incautadas en Nicaragua, la Procuraduría de Justicia capitalina tampoco ha podido concretar nada. Argumentó que los documentos encontrados dentro de las seis camionetas aseguradas en el país centroamericano, en los cuales aparece el nombre de Narcia, están en posesión de la Fiscalía de Nicaragua.
“Dichos documentos no fueron solicitados por la PGJDF pues es absoluta responsabilidad de la Procuraduría General de la República (PGR), la que por cierto ha mantenido un absoluto silencio del caso. Silencio que solo rompió Marisela Morales una vez muy al principio del caso, el pasado 20 de septiembre, cuando en entrevista radiofónica dijo que las camionetas no eran de Televisa, ni los 18 detenidos, empleados de la empresa. Desafortunadas declaraciones porque carecía de evidencia”, indican.
Peritaje inconcluso
En todo caso, la PGJDF argumenta, entonces, que no pudo realizar los peritajes correspondientes a papelería relevante en el caso Televisa para determinar si son veraces o falsos, simplemente porque no los tiene en su poder.
Por eso los resultados de la investigación de la PGJDF dejan mucho que desear. Además de que llama la atención que se haya dado a conocer el comunicado la tarde noche del viernes pasado, día de asueto y sin actividades para gran parte de la población.
Pese a lo anterior, la dependencia que encabeza el procurador Miguel Almeida giró oficios a las Secretarías de Seguridad Pública de todos los estados de la República, así como a las Procuradurías estatales, a fin de que la ayuden a localizar al menos a otras 10 camionetas que fueron dadas de alta a nombre de Televisa.
Y es que de acuerdo con las pesquisas hasta ahora realizadas, se tiene conocimientos de la existencia de otras 10 camionetas cuyas placas de circulación son las siguientes: 933-XCR, 438-XCJ, 469-WKS, 435-WKS, 896-WKX, 322-UER, 257-XNC, 178-XMP, 191-TAJ y 677-TAD.
Igual que las decomisadas en Nicaragua, estos vehículos fueron registrados a nombre de la empresa de espectáculos que dirige Emilio Azcárraga Jean. “Presentan el mismo tipo de irregularidades en el trámite vehicular”, especificó la Procuraduría.
elcronistadigital.com
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